Entre los grandes legados que nos ha dejado Mozart , es que gracias a su entendimiento absoluto de los requerimientos tímbricos de instrumentos que incluso nunca había tocado, podía hacer composiciones de una belleza realmente admirables, entre ellos , el concierto para Arpa y flauta y orquesta KV299.

Este concierto fué escrito en París a finales de 1778, el cuál figura entre las primeras obras que ven la luz en esta ciudad. Época en la cual Mozart buscando un buen empleo , se encuentra con la absoluta indiferencia de la gente, hacia sus obras y su talento, (podríamosmencionar también discriminación, hacía mucho tiempo que su encanto como niño prodigio había pasado).

El encargo de dos aristócratas , músicos aficionados , el Duque de Guiness y su hija , famosa arpista , a la que Mozart deberá de iniciar en la composición, pero que el considera "cordialmente estúpida y cordialmente perezosa".

Teniendo en cuanta la poca consideración que Mozart tenía respecto al Arpa y la flauta (más hacia esta última), logró una sorprendente amalgama de sus sonoridades, (Mozart puede pintar con los pinceles que tenga a la mano, aunque los trazos que estos realicen no sean los más de su agrado).

Es una pieza construída en una de las tonalidades mas simples la de Do mayor, con poca instrumentación con lo más necesario para copnvencer a los solistas, este es un trabajo largo y substancial, algo más cercano a la sinfonía concertante que en la forma de un verdadero concierto.Este concierto se muestra al oyente simpático y gracioso, y con una amplia gama melódica, todo lo que Mozart puede transformar en su mano , y hacer trascender con su genialidad.

Comentario de la época:

Sadie..." compuesto con cuidado y dedicación evidentes, y con esa aguda sensibilidad estilísitica tan del gusto de los aristocráticos protectores franceses"

Concierto para Arpa y Flauta y orquesta en Do Mayor KV299.(cuerdas oboes y cornos)

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